Thursday, September 26, 2013

El "rapeo" desde los bajos Heights, "I’m a Latin from Manhattan", en camino

El español en cualquier “yarda” “niuyorkina”, en cada uno de los barrios latinos, “friquea” a los castizos, y éstos, molestos, se “craquean” el coco, hasta desear caerle a “bimbazos” a quien lo hable; pues “bro”, los “jevis” de la lengua no pueden “cogerlo suave” ni irse a “parisear”  cuando se enfrentan a un “rapeo” distinto; pero si bajan las defensas y “cliquean” el “link” (véase el anexo) sobre un “issue” tan brutal, pueden  “desestresarse” y darle un “breik” a sus neuronas, “gufear”,  y hasta “juquearse” con el idioma de los “Latins from Manhattan”, el “Brons”, los Sures de “Bruklin” y/o pueblos limítrofes.

De meterle mano a dicha lingua franca, ya verán que se “culean”, "tripean"; y ya usted sabe,  "pa’tras ni pa’coger impulso", ni se preocupen por llamar a la academia que, "no problem, brother".

A  “janguear” se ha dicho, por el “bloque”, el de la JLo o por el de cualquier tigre en los Heights, a comprar en la “marqueta”, comer una carne “ripiada” o un ELA (mofongo con meatloaf), junto a su “jevo”o “jeva”, sin tener que preocuparse por el que no lo entiendan. Claro, con cuidado, que no aparezca un “foquin craqueao” y le dé un tumbe o le venda el puente “George Washington Bridge”, que la calle está bien dura; aunque siempre tenemos el idioma, el que sea; y en Niuyork nos tenemos todos.      
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“A lo largo de la historia, nuestra lengua se ha ido enriqueciendo con palabras procedentes de otras lenguas o extranjerismos. Estas se van incorporando al léxico español e incluso castellanizando al presentar una adaptación gráfica o de pronunciación relacionadas con el sistema español, como disyóquey, fan o chat. Dada la fuerte inserción de extranjerismos -sobre todo de anglicismos- en el español actual, no resulta raro tener dudas acerca de su escritura, pronunciación, y sobre sus respectivas variaciones gramaticales de número. Precisamente, atenderemos estos tres aspectos en el presente artículo. Para ello, partiremos de los diversos tratamientos, clasificaciones y descripciones establecidos por la Academia de la Lengua Española y la Asociación de Academias de la Lengua Española (2005) con el fin de ordenar y unificar la incorporación de los extranjerismos en nuestra lengua.

Encontramos dos grandes grupos de extranjerismos: los innecesarios o superfluos y los necesarios o muy extendidos. Para el primer bloque, la Academia sugiere un término español equivalente, así, por ejemplo, el vocablo abstract puede sustituirse por resumen o extracto. La voz más extendida que puede reemplazar a boy scout es escultismo, término creado del inglés to scout('explorar') y con probable influencia del catalán escoltisme; y cuando se trata de señalar el rating de algún medio de comunicación o medio televisivo, se sugiere la sustitución de este anglicismo por índice de audiencia.

El segundo bloque, lo forman los necesarios o extendidos, y abarca a todos aquellos extranjerismos que, por un lado, presentan una adaptación gráfica o de pronunciación de la lengua original y, por otro, mantienen la pronunciación y grafías originales asentadas y admisibles en nuestra lengua.

Los extranjerismos con adaptación gráfica o de pronunciación de la lengua original se dividen, a su vez, en dos subgrupos. El primero de ellos comprende a aquellos que mantienen la grafía original, pero la pronunciación y las reglas de acentuación son propias del sistema español. Son palabras tomadas de la lengua inglesa y asentadas en nuestra lengua: Cómic (de comic) que en español debe escribirse con tilde por tratarse de una grave terminada enc; su plural es cómics, también forma tildada porque termina en -sprecedida de otra consonante; aunque la palabra cómic esté aceptada y asentada, la Academia no deja de reconocer el uso de términos equivalentes como tira cómica, historieta, entre otros. Mánager (de manager) y su plurallos mánager vienen a ser palabras esdrújulas y por consiguiente deberán aparecer tildadas; como precisa la Academia de la Lengua, «aunque suele pronunciarse [mánayer], como en inglés, en español debe adaptarse la pronunciación a la grafía y decirse [mánajer]» (DPD: 2005). Otro anglicismo generalizado en nuestra lengua es máster (de master y este del latín magíster, 'maestro') con su respectiva forma plural másteres. En América, sin embargo, suele utilizarse el término equivalente maestría para referirse al grado o curso académico. Con el significado de 'copia a partir de la cual se hacen las demás', la Academia recomienda la sustitución por los equivalentes copia maestra o cinta matriz. Asimismo, la palabra píxel o pixel(de pixel) se ha incorporado al español con dos acentuaciones válidas, a las que les corresponde el plural píxeles y pixeles. Y por último, sándwich (de sándwich) es una palabra grave terminada en consonante distinta de -n o -s; la forma plural que le corresponde es sándwiches. Se trata de una palabra «mayoritariamente usada por los hablantes cultos en todo el ámbito hispánico, aunque en algunos países americanos, especialmente en Colombia, Venezuela, Chile y el Perú, circulan adaptaciones como *sánduche o *sánguche, más propias de registros coloquiales y desaconsejadas en favor de la unidad» (DPD: 2005).
Dentro del segundo subgrupo de extranjerismos necesarios encontramos, además, aquellos anglicismos que mantienen la pronunciación original, pero se da un cambio de la grafía (adecuándola al sistema español): Baipás, y su respectiva forma plural baipases, viene a ser una adaptación gráfica de la voz inglesa by-pass. El uso de esta adaptación se debe al su fuerte arraigo en el ámbito médico; no obstante, presenta el equivalente español puente (aorto)coronario o derivación (aorto)coronaria. Boicot (de Boycott, nombre del primer administrador irlandés a quien se aplicó el boicoteo) presenta el plural boicots. Cóctel o coctel(de cocktail) se ha adaptado al español con las dos acentuaciones y los respectivos plurales cócteles y cocteles.Disyóquey(de disc jockey) presenta la forma plural disyoqueis. Asimismo, esmog viene a ser una adaptación gráfica propuesta para la voz inglesa smog, acrónimo de sm[oke] 'humo' + [f]og 'niebla'; su plural es esmogs.
Finalmente, forman parte de los extranjerismos necesarios aquellos que mantienen la grafía y pronunciación originarias. Son ejemplos tomados del inglés: chat (de chat, 'charla'). Si bien se trata de un anglicismo asentado en español, la Academia sugiere dos términos sustitutos cibercharlao ciberplática; su plural es chats. En club (de club) se consideran válidas las dos formas plurales clubsy clubes. Por último, fan (acortamiento de fanatic) es un anglicismo asentado en nuestra lengua, aunque se sugiere los términos sustitutos admirador, seguidor o aficionado); si bien está generalizado el uso del plural fans, recomienda también usar fanes para la forma plural (DPD: 2005).
En realidad, el número de palabras que proceden del inglés no tiene fin, no así el artículo, por lo que les invito a describir, por iniciativa propia, los anglicismos que podemos escuchar todos los días.“


 

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